jueves, 9 de agosto de 2007

Armonía y bienestar gracias al Feng Shui

La principal tarea del Feng Shui es mejorar la calidad de vida humana a través del espacio y la decoración; es el arte de colocar cada cosa en su sitio.
La disciplina del Feng Shui parte de la idea de que el lugar que se ocupa en el universo depende de la relación entre las energías personales y las de la naturaleza o el ambiente que rodea a cada persona, por lo que las acciones humanas deben guiarse a mantener el equilibrio entre hombre y naturaleza.
Los principios de Feng Shui y los cinco elementos principales ayudan a equilibrar la energía de la casa y sus habitantes. No es extraño que una persona se sienta bien en una estancia y mal en la contigua. La meta del Feng Shui es decodificar esta íntima relación que une al hombre y a su entorno, afectando a su equilibrio emocional.
Para ello, existen varias teorías como la del 'Yinn y el Yang' o la de 'Los cinco elementos' (la Tierra, el Metal, el Agua, la Madera y el Fuego). En definitiva, el Feng Shui muestra la vía que lleva a equilibrar las energías personales y del hábitat, hogar u oficina, con las leyes de la naturaleza para poder vivir en armonía con ella. Así se puede aprender a manejar los problemas personales, desarrollando un potencial óptimo.
Armonía en el hogar
Por todo ello, la disciplina de Feng Shui establece el método de colocación que actualmente está revolucionando la forma de ubicar al hombre en su entorno, explicando cómo armonizar el hogar por medio de la aplicación de milenarios secretos chinos. Así, establece la mejor forma de disponer las distintas partes de la casa y ofrece los remedios para intentar hacer útiles aquellos espacios que no se puedan cambiar, por ejemplo una puerta.
Asimismo, dice cómo aprovechar mejor el espacio o alguna estancia concreta del hogar de acuerdo con la energía que fluye de los Cinco Elementos. Estos principios básicos, sobre los cuales es necesario diseñar la decoración y distribución del mobiliario, proporcionarán un ambiente que transmita armonía y bienestar. No sólo en casa, sino también en la oficina o lugar de trabajo, incluso en una sala de espera, ha de configurarse un ambiente cómodo y de relax.
El Feng Shui es un lenguaje de símbolos, interpreta la forma de una casa, la posición de un espejo o de una cama y su relación con el estado de ánimo de las personas. En resumen, es una forma de armonizar la vida del hombre y la naturaleza, que no promete cambios radicales, pero sí pequeñas mejorías que aumentarán la calidad de vida de quien lo aplique.